Hoy quería hablaros de las
famosas órdenes de compra (purchase
order, en inglés). La razón por la que me he decantado por tratar este tema es
que, a lo largo de este año, he observado que una gran parte de los errores
detectados en las traducciones que se reciben en la agencia en la que trabajo y
un buen número de malentendidos entre las gestoras y los traductores provienen
de no haber leído la orden de compra o de, al menos, no haberla entendido
debido a una mala redacción y no haber preguntado.
La orden de compra funciona como
un contrato. En ella, se describen las condiciones del servicio que vas a
prestar (tu tarifa, tu plazo) y las instrucciones para llevar a cabo el
servicio. Aceptar una orden de compra sin haberla entendido o leído equivale a
firmar un contrato sin haber leído tus condiciones. En el momento en el que
aceptas la orden de compra, te estás vinculando a ella de la misma forma en la
que te vincularías a un contrato laboral. Probablemente, puedas pensar que se
trata de una mera formalidad y que en ella tan solo se repiten los datos de un
trabajo que ya te han mencionado antes por correo electrónico o por teléfono,
pero no es así. En ella, puede que aparezcan especificaciones que no se te hayan mencionado antes y cuya no contemplación suponga que la traducción no se dé por
válida.
Asimismo, la orden de compra
suele contener datos relevantes en los que debes fijarte: si la tarifa se
establece en origen o destino (muy importante si traduces a un idioma romance,
ya que suelen ser más extensos que las lenguas germánicas, por ejemplo), el
plazo establecido (fecha y hora), si
hay entregas parciales, si debes seguir un determinado glosario, si debes
entregar los archivos bilingües o limpios, si debes usar una determinada herramienta de
traducción asistida, si debes evitar usar ciertas palabras, etc. Por tanto, si
no lees estas instrucciones y entregas tu traducción sin tenerlas en cuenta, lo
más probable es que el gestor te devuelva la traducción por muy seguro que
estés de tu calidad, ya que habrás incumplido los términos del “contrato”. De
hecho, debido a este incumplimiento, podrías pasarte semanas haciendo una
traducción y que la empresa se negara a pagarte, ya que no has cumplido con lo
pactado.
Por ello, aunque esto parezca muy
obvio, dado que, en mi experiencia, no lo es tanto, te recomiendo que dediques
unos minutos a leerte en profundidad la orden de compra o las instrucciones que
te envíe el gestor de proyectos y que no aceptes ciegamente lo que te pongan,
sino que preguntes todas las dudas que te surjan antes de aceptar. Además,
guarda esta orden de compra o el correo con las instrucciones, ya que puedes estar vinculado a un proyecto durante muchos años. Es
decir, te pueden pedir cuentas tras un par de años sobre un proyecto que
hiciste en el pasado si contenía datos sensibles y te vendrá bien saber qué te
pidieron y hasta qué punto es tu responsabilidad lo que haya pasado con ese
proyecto. Para rematar, confirma siempre
la orden de compra por escrito (evita el teléfono), independientemente de la
confianza que tengas con los gestores de proyectos. La empresa necesita tener
una garantía de que comprendes y aceptas las condiciones y, si no lo
haces, puede que reasignen la traducción a otra persona y que tú, mientras,
trabajes paralelamente a cambio de nada. Esa garantía es buena para ti y para
la agencia porque os vincula de una forma legal y hace que ambas partes estéis
seguras de que el trabajo se va a hacer bien y de que se va a remunerar
conforme a las condiciones establecidas.
Por supuesto, terminarás
trabajando con mucha frecuencia para las mismas agencias y aprenderás su forma
de proceder e incluso sabrás de antemano lo que te están pidiendo sin tener que
ver a priori la orden de compra, pero nunca des nada por hecho. Hay agencias
que no usan el método de las órdenes de compra para establecer un proyecto
entre la agencia y el traductor y no tiene nada de malo, pero exige siempre una
confirmación por escrito de tus condiciones y de las instrucciones que debes
tener en cuenta.
Dicho esto, espero que os sea
útil de alguna forma. Os deseo un buen fin de semana y que os traigan muchas
cosas los Reyes Magos :)
¡Una entrada muy interesante e informativa, Ana! Desde luego, las órdenes/pedidos de compra son fundamentales para los que trabajamos con agencias. :)
ResponderEliminarUn saludo,
Pablo
Gracias, Pablo. Espero que sí resulte útil porque a nosotros el tema de las órdenes de compra nos trae más de un quebradero de cabeza.
EliminarUn saludo,
Ana
Gracias por compartir esta información, Ana. Sin duda, es muy útil. Recuerdo que, cuando recibí mi primera PO, no sabía muy bien cómo iba todo el tema y tuve que hacer muchas preguntas para aclararme. ¡La comparto!
ResponderEliminarUn saludo,
Rafael López
Hola, Rafael:
EliminarMe alegro de que te haya gustado y de que os sea útil.
Un abrazo,
Ana
Enhorabuena por la entrada, además ayer hablábamos en corrillo virtual sobre todo esto, así que lo voy a difundir entre los alumnos.
ResponderEliminarSólo rompo una lanza (en las costillas del que empezó a usar la traducción "orden de compra") y recomendaría el uso de "encargo".
Un fuerte abrazo.
Gabriel Cabrera
www.gabrielcabrera.es
@tuitsdegabriel
Sí, la verdad es que es una traducción muy literal. Como nosotros hablamos siempre de venta y de compra en la agencia, es algo que se usa sin reflexionar sobre ello, pero tienes toda la razón.
EliminarUn saludo y gracias por tu comentario.