jueves, 19 de diciembre de 2013

De vuelta :)

Hola a todos:

Ya llevaba más de un año sin escribir en el blog y sinceramente, es imperdonable, pero es que mi vida ha cambiado en muchos aspectos desde la última vez que escribí, que era cuando me mudaba de Hamburgo. 

De hecho, como algunos ya sabéis, me he pasado al lado oscuro y ahora trabajo en una agencia de traducción en Madrid. Trabajar en una agencia me ha enseñado a entender lo que ocurre entre bastidores. 

Hasta ahora, mi punto de vista se basaba en mi experiencia en el departamento de Localización en una empresa de videojuegos, en mis traducciones juradas y para revistas y en lo que aprendí en la carrera. Es decir, casi siempre había estado en la posición del traductor, al que explotan, el que no duerme, al que malpagan, el que tiene que echarle imaginación a la vida y lidiar con gestores que parecen no tener ni un ápice de humanidad. Ahora, me he convertido en Darth Vader y soy yo la que exploto, no dejo dormir, malpago y a la que la importa un bledo luchar con su propio hijo… salvo que nada es blanco ni negro y, a partir de ahora, voy a intentar plantear diversos temas de cara al trabajo con una agencia del traductor: lo que esperamos, lo que hacemos y, a poder ser, por qué lo hacemos. 

También voy a intentar que se entienda el trabajo de un gestor de proyectos, pero, como sigo teniendo alma de traductora, el traductor seguirá siendo el protagonista.


De momento, os deseo a todos feliz Navidad y próspero año 2014. ¡En enero, charlamos!


viernes, 18 de enero de 2013

Auf Wiedersehen, Hamburg, meine Perle!

¡Feliz Año Nuevo a todos!

Esta es mi primera entrada del año y la verdad es que va a tener poco o nada que ver con la traducción a pesar del tema de mi blog.

Esta entrada está dedicada a toda la gente que ha hecho que mi tiempo en Hamburgo fuera muy preciado, a aquellos que me ayudaron a instalarme y a vivir en una ciudad nueva en otro país, a aquellos que pasaron por mi vida y dejaron una parte de ellos en ella, a aquellos que me ayudaron a trabajar en un contexto internacional, a entender mejor mi profesión y a aprender a ser una mejor traductora, a todos aquellos que han estado a mi lado a lo largo del tiempo, que han compartido mis quejas contra algunas costumbres alemanas y que me han enseñado a entenderlas e incluso a convertirlas en mis propias costumbres o manías. Esta entrada la escribo para dar las gracias a la gente que ha hecho que mis cinco años en Hamburgo fueran de los mejores de mi vida hasta el momento y el motivo de esta entrada no es otro que mi despedida de Hamburgo y de Alemania. 

Tras un par de meses haciendo mis pinitos como autónoma, me he dado cuenta de que sigo queriendo formar parte de una empresa, quiero volver a intentar luchar desde dentro para que nuestra profesión sea valorada y he encontrado un trabajo que creo que me dará la oportunidad de ser feliz y de hacer lo que quiero hacer (más detalles en el futuro) y este trabajo está en España, así que no tengo más remedio que despedirme de mis amigos y compañeros, aunque volveré de visita :)



Si alguna vez os habéis planteado salir de España y vivir un tiempo en el extranjero, yo os recomiendo que lo hagáis, ya que no solo aprenderéis un nuevo idioma sino que empezaréis a tener una perspectiva más amplia de lo que os rodea y a entender cómo la gente que ha crecido dentro de otra cultura ve el mundo, os volveréis más comprensivos, más abiertos, más respetuosos hacia lo que os es desconocido, espabilaréis en muchos sentidos, ya que el choque cultural y el cambio de idioma te impulsan a abrirte paso de otra forma y si os vais, cuando regreséis, haced balance y veréis que el mundo es muy grande, pero a la vez inmensamente pequeño y que seas de donde seas, al final, todos somos muy parecidos y buscamos y luchamos por las mismas cosas. Creo que es una experiencia que nadie debe perderse y menos hoy en día en este mundo globalizado. Hamburgo es una buena opción y además está llena de gente increíble :)


Mi próxima entrada la escribiré desde España, así que hasta pronto y gracias a todos por haberme acompañado en mi aventura alemana.

(Estoy lanzando un beso)